jueves, 19 de junio de 2014

EL POLLO: PELIGROSA "FABRICA" DE BACTERIAS...!

                                                

De entre todas las carnes que se pueden conocer y llegar a consumir como alimento, la más peligrosa y de gran cuidado.... Es la carne del pollo!.




Es un tipo de carne que no se necesita ni de las placas de Petri como para hacer un cultivo de bacterias.... La fabrica ella solita y a una velocidad ... Más que "peligrosa"!.

Y más peligrosa aún es cuando está en contacto con agua, donde se acelera de manera vertiginosa su producción de bacterias.

Cuando miro algunas recetas publicadas y veo que, en la instrucción de preparado, ya sea del pollo entero o de sus piezas, sugieren lavarlo/las!. Es lo peor que se puede hacer!.







Ya es bastante dudoso el ver, en las bandejas, en los supermercados, que, debajo de las piezas de pollo exhibidas, la presencia de un cierto líquido rojizo desplazándose lánguidamente si movemos la bandeja. Muchas veces, puede presentarse por un problema de pérdida de cadena de frío y, ya las bacterias, estarán haciendo de las suyas.

Hablando de "frío", un pollo puede estar acondicionado por congelación pero, si cuando fué manipulado para su fraccionamiento, estuvo en condiciones precarias y sin cuidado, o se demoró el tiempo en el proceso, ese pollo puede ya tener bacterias, el frío por congelación podrá contener a ese pollo pero, las bacterias sólo estarán "dormidas", quietitas hasta que vuelvan a tomar contacto con la temperatura justa para que vuelvan a "despertar" y seguir con su proceso de multiplicación.

Si llegado el caso, en dichas bandejas encontramos alguna que tenga poco de ese líquido y debemos comprarlas, una vez llegados a casa, ponerse a sacar inmediatamente las presas o el pollo en cuestión y ponerlo/las a escurrir, luego secar todo con papel absorbente y dedicarse al preparado de la comida. En caso de que, el preparado, no es para una comida inmediata, recurrir a los condimentos para macerar todo y poder "cortar" con cualquier proceso bacterial; reservar en recipiente limpio y hermético y colocar en heladera.

Otro detalle importante es, si la receta permite, retirar la mayor cantidad de piel para evitar aún más el proceso bacterial.


Cuidado!. No quiere decir que debamos erradicar de la dieta carne de pollo; simplemente seamos más observadores de la calidad de pollos que compremos.


ADRIANA GROSSI

19/06/14

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