Observé un caso de paciente, previo a su intervención quirúrgica; a quien se le presentaron dos personas del hospital. Una, profesional de psicología y otra, de psiquiatría.
A ver, vamos a hacer una breve
introducción a estos "campos-de-la-ciencia".
Psicología: "Estudio
científico de la conducta y la experiencia, de cómo los seres humanos y los animales sienten, piensan,
aprenden y conocen para adaptarse al medio que le rodea".
Psiquiatría: "Es la
ciencia que se dedica al estudio y tratamiento de las enfermedades mentales. Su
objetivo es prevenir, diagnosticar, tratar y rehabilitar los trastornos de la
mente".
Veamos: Ambas "disciplinas" estudian conductas, estados de la mente, en
este caso, humanos. Pero... ¿Realmente ayudan al paciente?.
Ahora bien. Entre estas dos
personas profesionales, ante un caso, su enfoque... Es más que diferente. No
pueden "desprenderse" de la mecánica de lo que han aprendido: Los
resultados de lo que captan y el resultado de lo que emiten y actúan en
concordancia... Son diferentes!.
También tiene mucho que ver la
personalidad de cada uno de estos "profesionales":
Si prevalece lo aprendido en su
profesión, o su "cosecha" personal.
Ví que, al paciente, le traían
una pastillita. La enfermera venía enarbolando la misma cual estandarte entre
sus dedos y le decía, al paciente, que se la enviaba el profesional xx y que la tomara.
¿Había existido una explicación
previa, para el paciente, de para qué servía esa "misteriosa"
pastillita?.
Ví que la enfermera le decía al
paciente: "Es para que se sienta más... "Relajado" antes de la
cirugía".
El paciente, por respeto, la
tomó. Pero, dicha pastillita, resultó que no fue de mucha ayuda y, encima,
había "adormecido" sus respuestas físicas como para valerse, por sus
propios medios, como para levantarse y dirigirse al baño.
¿En qué cabeza cabe, por parte
del profesional de este caso, de indicarle ingesta de una medicación, al
paciente, cuando ni sabe qué efecto le puede causar?.
¿Y si el paciente, algo
mareado, se caía en el baño y no se enteraba nadie?.
Aquí, el gran
"riesgo"... Es el profesional que suministra la pastilla!.
A todo esto, el profesional de
psiquiatría... ¿Probó, investigó dicho medicamento para comprobar si era el que
correspondía para dicho paciente?. O sólo tenía referencia que, dicha pastilla,
servía para cierto posible estado anímico del paciente?.
Cada organismo, ante una
medicación y posología... Responde de un modo diferente!.
¿Alguien tiene en cuenta ese
... Detalle?.
Siempre digo que, la persona,
ante la posibilidad de incorporar una medicación "nueva" a su
organismo, debe "presentar" ese producto nuevo, a su organismo. Si
esa medicación es "fraccionable", comenzar a incorporarla en pequeñas
dosis para que no tenga una modalidad "invasiva" que presente malos
resultados.
No... No es cuestión de
"pastillita"... Y asunto arreglado!.
ADRIANA GROSSI
03/05/12
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